¿El amor no es fácil sabéis?. Un dia te enamoras, así paf! De repente, eres feliz, sientes ese hormigueo en tu barriga, y al dia siguiente, todas las miradas que ayer iluminaban tu cara, se vuelven grises, oscuras. Pero esos dias malos, forman parte del sentimiento. En cambio, cuando se acaba el amor, o cuando no lo encuentras por ningun lado, tienes motivos para encontrarte más que perdida. Al contrario de lo que muchos puedan pensar no trato de escribir algo coherente, o bonito, algo que lea alguien y que en cada renglón se sienta profundamente indentificado. Solo trato de vaciarme. De contar lo mismo que pienso cada noche al acostarme, y cada mañana al ponerme en pie. Quizás solo sea un texto más, uno de muchos parecidos... Si os fijais todas las cosas que escribo suelen asemejarse bastante, pero supongo a que esto es debido a que no existen dos dias adyacentes lo suficientemente diferentes como para dar pie a textos totalmente opuestos. Lo que pretendo decir, esque hay noches en que en mis sabanas hace más frío que en el polo norte, que admito que sueño demasiado y que tal vez tengas razón y ha llegado el momento de poner los pies sobre la tierra por un tiempo. Dejar a un lado esta 'ílusión' y centrarme en mi, en ser feliz. Que a veces creo que la gente no cree en mí, que mis acciones pasan por sus vidas como el silencio en plena hora punta en Madrid. Rápido, fugaz. Que aunque sepa poco sobre historia, y mis principios de geografía se hayan venido abajo después de este año sabático, considero que se un poco sobre la vida. Y tambien admito, que después de mil noches tras ese dia en que la parte mas asquerosa del amor vino para destrozarlo todo, hoy han venido las ganas y han llamado a la puerta. Y yo, he sido tan estupida que anoche se me olvidó echar el cerrojo. Y has entrado. Y es en este momento cuando una piensa que una de dos, o es que el día tiene un poco más de sol, o es que te apetece tener un poquito de amor en tus días. Y aunque nadie se haya dado cuenta, aunque hayas gritado bien alto que jamás creíste, ni crees, ni creerás en el amor, la realidad es que un dia creíste tan, tan, tan fuerte que se te acabaron las ganas de pensar en un 'creerás'. Pero hoy estás aquí, poniendo todo tu empeño en auto-convencerte de que toca ser feliz, toca coger las riendas de tu vida, y pensar que esta vez si, puede que todo salga bien. Y descubres, que eso, simplemente, eso... ha sido lo que te ha faltado durante todo este tiempo. Alguien que te acompañase en cada paso y te prestase sus fuerzas en cada intento. Alguien a quien querer... y alguien que te quiera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario