martes, 17 de mayo de 2011

Prometo volar en el proximo intento.

 De repente llega un dia en que sientes que todo va a cambiar. Que cuando menos te lo esperes, comenzarás a sentir, a querer, a vivir. Que queda poco para que llegue tu momento, y cuando llegue vas a sentir que tienes tanta paz que ni un huracán podrá arrasar con esa sensación que te invade por dentro. Te sentirás como esas cometas que sobrevuelan el cielo azul de Valencia una tarde de viernes cualquiera. Libre. Sentirás que ya nadie moverá tus hilos, y que al primero que trate de amarrarte a la tierra, te llevarás por delante, arranando sus pies del suelo e invitándole a volar contigo. Le dirás antes de nada, que tú tambien estuviste muerta en vida alguna vez, que tú tambien creíste no tener nada, cuando en realidad tenías más que todo. Que tu también echaste de menos una amiga de verdad, y alguien que te sacase a bailar en medio de una pista de baile aunque tu le suplicases que te dolian los pies y no estabas preparada para brillar esa noche. Y que él se empeñase en que habia llegado tu momento, el momento de que tu estrella comenzase a tener luz propia. Le dirás que tuviste un ídolo, y que aunque muchos te llamaron loca, todos acabaron por aplaudir la suerte y mérito que habias tenido de encontrarle. Y cuando esa persona a quien tu hoy das lecciones despegue sus pies del suelo, tu ya estarás muy por encima del cielo. A miles de millones de años luz. Y serás perdida e irrevocablemente FELIZ.

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