Hace un año, hubiese dado media vida por este viaje. Hace dos semanas, también. Estoy feliz, contenta, no voy a negarlo. Voy a su casa, voy a cumplir un sueño, el sueño de toda una vida... De repente, todos esos dias en que ansiaba cruzarme con su mirada bajo el cielo azul de Valencia y el viento de Levante, van a adquirir sentido, y no imaginais la sensacion tan gratificante que eso supone... Pero, ¿sabéis?, es como si a pesar de todo eso, algo me impidiera sonreír, como si tuviese la sensación de que durante dieciocho años me he estado engañando dia tras dia. No sé como explicarlo, no sé. Pero esque llevo toda la tarde, esperando escuchar que el Torneo se ha trasladado a Extremadura. Llamadme tonta, pero daría cualquier cosa por esta noche, en el descanso del partido, tener valor para decirle a mi madre: "Mañana, antes de salir camino a Valencia, dejarme en la Estación, que yo me voy a Mérida". Es como si desde hace unos dias, ese destino ideal hubiese cambiado de tonalidad, como si ya no fuese Valencia, como si ahora fuese ella. No sé. Es que ahora mismo mis ojos no ven más allá de ella... Fue todo tan sumamente increíble, que se me hace imposible imaginar destino mejor que "su lado". Que es todo lo que siempre he buscado, y que hace un año y tres meses encontré. Pero no fue hasta hace tres dias, hasta que me di cuenta de lo que en realidad tenia. Compartir ocho horas de veinticuatro que tiene un dia bastaron para darme cuenta, que me da exactamente igual las personas que formen parte de mi futuro. Que me da igual que esten ellas, hasta me da igual que esté él. Solo pido que este ella. En cada dia, de cada mes, de cada año... Nada más. Y no veo el momento de salir corriendo, y que no existan más despedidas. Coger un tren que nos mantenga unidas, para siempre... Que cada vez que haga la maleta sea para irme de viaje con ella, y cada billete que compre tenga una pareja, que cada asiento de al lado del mio en ese autobús esté ocupado por ella, y que cuando me pase de estación sea ella quien se de cuenta. Quiero un mañana con ella, un hoy con ella, y un SIEMPRE, a su lado... Quizás por eso no quiero irme. Porque será maravilloso, será increíble. Pero me hubiera gustado tenerla a ella en ese momento en que nuestros ojos se crucen. Tendré a esa otra persona, pero no puedo evitar pensar, que me faltará la ultima pieza de mi puzzle para sentirme completa... Ya no sé ser sin ella...
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