- Necesito decirte algo.
- ¿Lo necesitas?.
- Si, necesito decirte que te...
- Espera. Antes de que pronuncies la siguiente palabra debes saber que a lo largo de mi vida he cometido muchos errores, y que nada me garantiza que tu no seas otro, a pesar de que dentro de mi algo me diga que estás tan hecho para mi como el helado de stracciatella que me como cada viernes. Que he llorado por quien no debía, y he reído con falsas amistades, de esas que a la primera de cambio se olvidan de ti, de tu nombre y de todo lo que un día pudiste hacer por ellas. Que por eso, cada vez creo menos en la palabra amistad. Que he tropezado dos veces con la misma piedra, y cuando pensé que ya no lo haría más, me empujaron y caí estampada con la tercera. He perdonado mucho, demasiado, a personas que un días después no me perdonaron nada a mi. Y he callado "te quieros" que por miedo a hacerme daño, quedaron en el aire. Han existido temporadas en que a las 8 de la mañana me he levantado con ganas de comerme el mundo, y otros en que a las 12 del mediodía, el mundo me comía a mi. He gritado con fuerza, y aunque hayan existido dias en que mi voz no salía, jamás he dejado de gritar. He callado verdades por no hacer daño, aunque para ello haya tenido que mentir. Hay dias en que he dormido solo para verte en mis sueños, y otros en que tu recuerdo no me dejaba dormir. He abrazado a la ultima persona que pensé que algun dia me haría daño y más tarde me he dado cuenta de que esa persona no se merecía ni el roce de mi piel. Gracias a mi ídolo he tenido la sensación de volar más alto que las nubes. He cantado en la ducha hasta que mi garganta no podía más. Han existido días en que me he sentido guapa y otros muchos en que me ha dado miedo mirarme al espejo. He descubierto que el paraíso puede encontrarse en el tacto de una piel suave, que las caricias son mas fuertes que los golpes y que el simple tacto de tu mano enredada con la mia, puede hacerte volar. He disfrutado de los pequeños detalles, y he sabido poco a poco en qué consiste la vida. Y el secreto, el verdadero secreto de todo, está en no arrepentirse de nada.
- ¿Ya puedo terminar la frase?
- Tú sabrás si despues de todo esto aun deseas terminarla.
- TE QUIERO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario