miércoles, 27 de julio de 2011

Too little.

Le he robado la cartera a la tristeza, he pasado tardes muertas de verano con mis culpas, no he tomado drogas de esas que te hacen pasar noches enteras fuera de tu cuerpo, pero si he bebido del alcohol de la más absoluta felicidad y también me han aplastado los miedos y fobias de la infancia. He querido y he odiado, fui capaz de saltar las tapias del rencor aún creyendo que jamás lo conseguiría, he pedido perdón cuando no debía ser yo quien lo hiciera, y no lo he pedido cuando realmente era yo la culpable. He hecho cosas irreparables de las que no me arrepiento, porque si un dia las hice fue porque pensé que era lo correcto en aquel momento, he perdido a personas que no echo en falta, pero si echo de menos esos momentos que pudieron regalarme, he mentido por un amigo y he dicho la verdad aun sabiendo que así lo perdería todo. He tanteado con mi mano el camino de tu espalda encontrando el tiempo perdido. He sido  protagonista y antagonista.  El día que te conocí fui capaz de atrasar los calendarios. He corrido delante de la poli mientras me preguntaba si tal vez pensaban que estaba huyendo de ellos, he visto llorar a mi madre… Pero la única vez que vi llorar a mi padre lágrimas desconsoladas supe que había terminado todo. He subido a trenes sin destino en tardes en que no había nada que hacer, vi como España ganaba el mundial en el sofá de mi casa después de ir a todos los partidos a la pantalla gigante del Bernabéu, he hecho muchísimas cosas por muchas personas. Algunas me lo agradecieron, otras no. He ocultado mis defectos hasta que me cansé de mostrar solamente mi mitad. He visto a la pobreza pasearse por las aceras de la Gran Vía mientras otros íbamos con una cartera con 50€ que esos obtendrían en un mes. Hice un mundo a su medida, me conozco de memoria sus cosquillas. Me han engañado, he sido fiel y he dado hasta vaciarme. He firmado 900 despedidas, he probado la anestesia, he sido cobarde y valiente. He pensado que no valía para escribir, hasta que escribir se convirtió en un sueño. He escuchado a los árboles, me he hecho la dormida y he probado la gloria tras darlo todo por perdido. Me he gastado mucho dinero en cosas innecesarias, me han roto el corazón de todos los modos posibles y también he hecho mucho daño. Me he tatuado un número especial. Me he perdido en Madrid aun siendo madrileña, he viajado en avión cuatro veces, he salido de España. He visto el amor con estos ojos, he hecho caso a mi cabeza y a mi corazón, he probado 1000 vidas diferentes pero lo más importante, he conseguido que me quieran.

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